domingo, 8 de octubre de 2017

El arte desde la oscuridad

¿Alguna vez has entrado en un museo y has sentido la necesidad de tocar alguna de las obras que allí se exponían? ¿Has tenido que meter las manos en los bolsillos para evitar que salieran disparadas hacia aquella escultura o cuadro cuya textura estaba diciendo "tócame" haciendo que saltaran todas las alarmas?
Si te encuentras en este grupo de curiosos, estás de suerte pues en Madrid existe un museo donde te dejan tocar todo lo que puedas ver con los ojos para que además lo puedas ver con las manos.
Acabamos de inaugurar el curso escolar y acabo de encontrar la noticia de esta exposición que se acaba de inaugurar hace unos días en el Museo Tiflológico que tiene la ONCE en Madrid.
La exposición es especial no sólo por el lugar en el que se encuentra, también lo es por los autores que han realizado las obras que se exponen. Se trata de once obras pictóricas realizadas por artistas que pintan desde la oscuridad, personas especialmente creativas que a pesar de haber perdido total o parcialmente su visión han sabido aprovechar sus capacidades creativas para demostrarnos que la pintura o el arte en general también está a su alcance.
Durante este curso vamos a seguir aprendiendo a comunicarnos con el lenguaje visual, vamos a seguir aprendiendo a ver, pero como ya habréis comprendido leyendo esta entrada, existen muchas formas de ver, de las cuales sólo una es a través de la vista. Podemos ver un cuadro o una fotografía con la imaginación a partir de su descripción, podemos ver y sentir un paisaje a partir de nuestra piel, nuestro olfato o nuestros oídos, podemos ver una película mientras alguien nos la cuenta, podemos ver las esculturas a través del tacto...

Si te ha gustado lo que has leído, aquí te dejo el vídeo de otra exposición también del Museo Tiflológico en la que se mostraron obras escultóricas que se podían ver con las manos.
Como "veréis" se trata del museo favorito de los niños, ya que por fin podrán tocar las obras sin que les llamen la atención.
Poco a poco vamos aprendiendo que en vez de fijarnos en las cosas para las que estamos dis-capacitados, debemos fijarnos en que todas las personas estamos capacitadas para hacer muchas cosas. Cada uno tiene que encontrar cuál es su capacidad y utilizarla al máximo.
¿Sabrías decir cuál es tú capacidad?

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