Un ejercicio que les obliga a reutilizar un material que habrían tirado a la basura o en el mejor de los casos al contenedor amarillo (que aquí no tenemos, por cierto). Además al ser un trabajo en grupo tienen que ponerse de acuerdo en qué van a hacer y de esta forma aprenden a tomar decisiones haciendo propuestas y escuchando las de los demás, cosa que les cuesta mucho.
Aquí os dejo el resultado...
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